Las funciones del cuidador de personas dependientes

Funciones del cuidador de ancianos y personas dependientes

El cuidador de adultos mayores y personas dependientes supone una figura muy importante en el día a día de la persona a la que se cuida. Es un importante apoyo a la hora de realizar las tareas cotidianas, la higiene personal del usuario, la toma de medicamentos de forma correcta, la alimentación o, incluso, el bienestar psicológico y social de la persona. Además, es una profesión con muchas oportunidades laborales, y con la que se puede acceder a un buen sueldo. A continuación, os contamos cuáles son las principales funciones del cuidador.

Cuidado

Por supuesto, el cuidado es la principal función. Básicamente, nos estamos refiriendo al acompañamiento y la atención a las necesidades que pueda tener la persona dependiente. Se trata, ante todo, de que no se sienta desamparada.

Ayuda con la limpieza e higiene

Debemos ocuparnos de que la persona tenga una correcta higiene personal, tanto por su bienestar como por su salud, además de un espacio limpio y ordenado en el que esté a gusto.

Es importante recalcar que el cuidador no está ahí para ofrecer un servicio de limpieza, sino que se ocupará de que el entorno de la persona dependiente esté lo más ordenado posible y el usuario se sienta cómodo en su espacio personal.

Actividad física

Es importante que la persona a la que cuidamos mantenga una buena actividad física, siempre acorde a sus posibilidades. Debemos motivar siempre que, dentro de lo posible, el usuario se mueva o practique algún tipo de ejercicio. Esto le ayudará a mantener una buena forma física y, por supuesto, una buena salud mental.

Cuidar la alimentación

La alimentación es un apartado imprescindible. Debemos encargarnos de que la dieta de la persona sea completa y variada, y adaptada a sus necesidades. Puede que el usuario necesite, por ejemplo, una dieta blanda o una dieta que prescinda de ciertos alimentos.

Asimismo, en este apartado debemos tener en cuenta que, en muchas ocasiones, la persona necesitará que le demos de comer. Es muy importante que lo hagamos con paciencia, adaptándonos a su ritmo.

Acompañar al adulto mayor

El acompañamiento es una de las funciones más importantes a la hora de ejercer la profesión de cuidador. No podemos pasar por alto el hecho de que, en muchos casos, la persona puede sentir soledad, y nuestra compañía puede suponer la única que tenga en su día a día.

En este aspecto, es muy importante que mantengamos una actitud positiva y sirvamos de apoyo a la persona, que la escuchemos, que comprendamos sus necesidades y que empaticemos con ella.

Medicación

Este es un apartado al que debemos prestar mucha atención. El cuidador debe encargarse de que la persona tome su medicación a tiempo y cuando le corresponda. Por supuesto, nunca le daremos medicación que no haya sido debidamente prescrita por un médico.

Movilidad

Tendremos que ayudar a la persona a desplazarse de un espacio a otro y, dependiendo del grado de dependencia, puede que tengamos que tumbarla en la cama, ayudarla a sentarse, etc.

Características y habilidades de un cuidador

Una persona que va a dedicarse al cuidado de personas dependientes debe tener ciertas habilidades para poder realizar de la mejor manera una profesión que, ante todo, debe ser vocacional. Aquí os dejamos algunas:

Empatía

Tener la capacidad de ponerse en el lugar de otra persona para entender sus necesidades es uno de los rasgos más importantes de un cuidador. Implica realizar un gran esfuerzo y tomar la decisión más adecuada en cada momento para garantizar la calidad del servicio y su calidad de vida.

Capacidad de resolución

Junto con la empatía, saber cómo actuar en cada situación es muy importante. Asistiendo a personas mayores, con dependencia y en muchos casos con alguna patología asociada, se dan muchos tipos de situaciones que necesitan una solución. Por eso es importante contar con las herramientas, técnicas y con la experiencia necesaria para saber resolver cualquier tipo de situación conflictiva o problemática.

Vocación de servicio

Quizá lo más importante sea tener pasión por esta profesión y el deseo de servir a los demás a través de la empatía y el positivismo, y con los conocimientos necesarios.

La paciencia

Las personas mayores suelen tener dificultades para realizar incluso las tareas cotidianas más sencillas. Hay que entender que el envejecimiento es una etapa por la que todos pasamos y que, aunque estas situaciones puedan ser un poco frustrantes, debemos manejarlas con paciencia, poniéndonos siempre en el lugar de la persona.

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