¿Cuáles son las Funciones del auxiliar técnico de veterinaria o ATV?
Es común tener dudas acerca de las funciones que puede tener en una clínica veterinaria la figura del ATV. Podríamos decir, incluso, que en algunos veterinarios no lo tienen muy claro. En ocasiones se puede pensar que el ATV veterinario solo está detrás del mostrador recibiendo clientes, y nada más lejos de la realidad. Pero ¿qué hace un auxiliar de veterinaria? Aquí te lo contamos todo.
Un auxiliar de veterinaria puede encargarse de muchas funciones que son inherentes a su puesto, y que no representan ninguna amenaza de intrusismo para ningún médico veterinario sino que, por el contrario, pueden ser una figura importante en el funcionamiento del centro veterinario. El ATV es una persona con la cualificación necesaria para apoyar al médico veterinario en la consulta, en el quirófano y en cualquier área del centro, y un profesional que aportará valor añadido a los servicios del mismo.
Funciones del auxiliar técnico de veterinaria
Lo primero que debemos tener claro es que un ATV no puede diagnosticar a ningún paciente, bajo ningún concepto, en primer lugar porque no posee los conocimientos para ello, ya que no ha estudiado la carrera de veterinaria; y en segundo lugar, porque al carecer de los conocimientos necesarios, legalmente está prohibido.
El ATV debe estar familiarizado con los procedimientos más habituales de la consulta como son: la preparación de medicamento, limpieza de oídos y dientes (siempre que no requiera sedación), extracción de sangre, conservación de muestras, llevar los registros de los pacientes, tomar la temperatura de los pacientes, estar atento a las constantes de un animal hospitalizado, darle de comer, etc.
El auxiliar de veterinaria debe asistir al veterinario en lo que este necesite durante la consulta, operación en el quirófano, sala de radiodiagnóstico, etc., y atender a los clientes que asisten a las consultas, así como estar atento al mantenimiento del local.
Atención al cliente
El ATV debe ser una persona capaz de desarrollar una buena relación pública, un buen vendedor (de imagen y de productos), debe ser un gestor eficiente de las relaciones con los clientes, ya que suele ser la primera cara que ven al entrar en el centro; debe ser un buen organizador y un óptimo ayudante para el veterinario. Será el encargado de recibir a los clientes citados, darles la bienvenida y acompañarlos a él y a su mascota a la sala de consultas. Ha de prestar atención a las necesidades y dudas que le pueda plantear el cliente, y hacérsela llegar al veterinario en los casos que correspondan. Deben reflejar de forma clara y concisa la información que los clientes le soliciten.
El trabajo de organización y control de clientes, materiales e insumos, proveedores, administración, así como el mantenimiento de la clínica estará a cargo del auxiliar de veterinaria, permitiendo así que el veterinario dedique su tiempo a la revisión y diagnóstico de los pacientes.
Al ser los que atienden a los clientes, el ATV veterinario debe estar atento a las necesidades y gustos del cliente, y debe intentar satisfacer las necesidades y deseos del cliente mediante la oferta y suministro de un producto o grupo de productos. Para una buena atención es muy importante escucharlos, asesorarlos y tomar decisiones juntos. Deberá procurar que el servicio al cliente sea igual o superior a sus expectativas, así tendremos un cliente satisfecho, lo que facilitará su fidelización.
Mantener y supervisar la clínica veterinaria
El ATV debe tener todo dispuesto para atender a los clientes, y darles el mejor servicio a ellos y a sus mascotas. Deben tener el material disponible para las consultas, mantener los espacios limpios y desinfectados. En el quirófano, debe asistir al veterinario y mantener la sala esterilizada y desinfectada. Debe procurar que la sala de radiodiagnóstico esté equipada para un trabajo seguro y sobre todo tratar al cliente y a la mascota con empatía.
Con el cliente, debe ser amable y ofrecerle el mejor servicio, tanto en productos como en trabajo. En general, un auxiliar de veterinaria debe responder a las necesidades tanto del veterinario como del cliente y su mascota, hacer de la clínica una estancia agradable y ordenada.
Asistir al veterinario en consulta y el quirofano
Antes de dar inicio a cualquier consulta, el ATV debe asegurarse de que la mesa esté limpia y desinfectada para el próximo paciente, y el material necesario que el veterinario pueda llegar a necesitar para la exploración del animal esté disponible en la mesa auxiliar.
Debe cerciorarse de que el veterinario dispone de toda la información sobre los motivos de la visita de un cliente y su mascota, revisar periódicamente el frigorífico para comprobar las fechas de caducidad de los medicamentos (así como el armario para la medicación de uso interno ordenado por preferencia y por tipo) y debe cerciorarse de que los medicamentos no estén caducados ni en mal estado. En la consulta, así como en el quirófano, la tarea del ATV es ser el apoyo del veterinario durante la exploración del animal.
En caso de hospitalización o ingreso de una mascota, el ATV veterinario será el responsable de entregar al cliente los presupuestos e informarles sobre el estado de su mascota, según los informes emitidos por el veterinario, alimentar al animal, y realizar todas aquellas labores que le sean encomendadas por el veterinario.
Y ¿qué hace un auxiliar de veterinaria en el quirófano? Básicamente asistir al veterinario y al anestesista en lo que necesiten, como por ejemplo: organizar el quirófano, verificando que todos los materiales y equipos estén en orden y a mano para su utilización, asegurarse de que las condiciones de iluminación y temperatura sean las adecuadas; prestar ayuda y asistencia durante la intervención, proporcionándole el instrumental quirúrgico según lo vaya requiriendo, y seguir todas las indicaciones que le vaya dando el cirujano.
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Nota: Este artículo ha sido desarrollado gracias a la participación y colaboración de nuestras alumnas Natalia Rus Pérez y Patricia Lorenzo Tomé.
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