Nuestros amigos felinos siempre nos sorprenden con una increíble agilidad, equilibrio, orientación en la oscuridad… Lo que muchos no saben es que, en todas estas capacidades, sus bigotes (que, en realidad, se llaman vibrisas), cumplen un papel protagonista. Aquí, te contamos algunos datos sobre los bigotes de nuestros gatos que son realmente sorprendentes.


1. Orientación en la oscuridad

Las vibrisas juegan un papel fundamental en una de las características más conocidas de los gatos: su manera de orientarse a la perfección en la oscuridad.


2. Calcular espacios

Los bigotes del rostro ayudan a los gatos a calcular si caben dentro de un espacio. Es por eso que, antes de entrar en un rincón pequeño, exploran la zona con su cabeza. De hecho, los bigotes de su hocico tienen aproximadamente el ancho de su cuerpo, lo que facilita mucho esta tarea.


3. Gafas de cerca

Los gatos tienen una vista increíble a la hora de localizar objetos a larga distancia, pero su visión de cerca no es tan buena. En estos casos, sus bigotes cumplen la función de “gafas de cerca”, ayudándoles a reconocer los objetos que tienen cerca. Es algo parecido al sentido del tacto, que les ayuda a crear una imagen mental de lo que tienen delante.


4. Ayudan al equilibrio

Los bigotes les aportan una gran visión espacial y coordinación corporal, por lo que son imprescindibles para su gran equilibrio.


5. Estado de ánimo

A la hora de mostrar su estado de ánimo, las vibrisas son muy importantes. Por ejemplo, si los bigotes están rígidos, muy probablemente nuestro gato estará en tensión, mientras que unos bigotes relajados, por lo general, muestran la calma que siente nuestro amigo felino.





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